Caja Rural de Toledo se afianza en un «futuro propio» y en solitario

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YOLI LANCHA

Las alarmas saltaban ayer entre el colectivo de periodistas que acudieron a la visita que el presidente de Caja Rural de Toledo, Andrés Gómez Mora, realizaba al Centro de Atención Temprana de Apace cuando el representante de la entidad toledana tuvo que ‘abortar’ la agenda que tenía programada hasta la tarde como padrino de Marsodeto por motivos relativos a las gestiones con la entidad financiera. Ahora bien, y para disipar toda sospecha o rumorología, la premura con la que tuvo que partir Goméz Mora no fue, ni más ni menos, según informaron fuentes de Caja Rural de Toledo, que por reuniones y gestiones internas de la propia entidad que requerían la presencia de Andrés Gómez Mora para «trámites rutinarios».

Sin embargo, como Gómez Mora tuvo que suspender todos los actos que tenía previstos y la situación de las entidades financieras está sometida a una vorágine de sorpresas, desde Caja Rural de Toledo negaron a La Tribuna de Toledo que esta situación tuviera nada que ver con las fusiones. 

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